martes, 30 de noviembre de 2010

Verdadero/Falso

BAMBAS. Optar entre verdadero o falso en un examen puede ser una prueba sencilla comparada al discernir cuál es verdadero o falso cuando se trata de bienes de consumo. El crecimiento del mundo de la moda hace que, con cada vez más frecuencia, se valore, no solamente la marca sino el diseño de estos bienes como bolsos, relojes, joyas, ropa y lentes. Pero, el que puede, puede. Es frecuente que las empresas cobren precios elevados por sus productos conocidos, lo que deja a muchos sin poder disfrutarlos. ¿Existe alguna solución? Pues claro, las imitaciones o "productos bamba" son el pan de cada día, presentes en las calles, en mercados y hasta en tiendas dentro de centros comerciales. No solamente sus precios son más baratos, sino que el diseño es una réplica casi perfecta

Podría parecer que adquirir imitaciones es la solución real porque con un menor precio llegas a tener, a la vista, el mismo par de lentes, la misma ropa. Pero tú sabes que no es verdad. Esto sugiere un estudio que plantea que la compra de bienes bamba tiene costos psicológicos para el consumidor. Tras realizar una serie de experimentos con mujeres, se llegó a concluir que aquellas que pensaban que estaban usando designer knockoffs (imitación de bienes de diseñador o de marca) eran más propensos a mentir, a desconfiar de la honestidad propia y la de otros. ¿Cómo se llevaron a cabo las pruebas? A estas mujeres, de edad promedio 22 años les dieron lentes, todos de ellos de diseñador, pero a la mitad se les dijo que estos eran bamba. Una de las pruebas realizadas consistía de identificar, dentro de un cuadrado separado con una diagonal cuántos puntos se encontraban a la izquierda y a la derecha de esta línea. Cada uno de estos lados representaba una ganancia en dólares distinta. Resultado: 71% de las personas con los supuestos lentes falsos inflaron la cantidad de puntos encontrados en el área que brindaba más dinero mientras que, en el caso de aquellas que creían que tenían los verdaderos la trampa solo llegó a un porcentaje del 30%.

Pero, ¿qué pasa con las miles de marcas y tiendas que venden productos similares a los de diseñador (mismo modelo, colores) con su propia marca a un precio muchísimo menor? Entre estas se encuentran las internacionales ZARA, MNG y hasta las locales como Topitop ofrecen prendas de vestir y calzado que estéticamente son semejantes a bienes de diseñadores más costosos. Es sabido que estas mismas marcas están al tanto de los diseños más costosos para luego imitarlos. ¿Nos hace más fraudulentos comprarlos? Para nada: todo está en tu cabeza.

Foto lentes de aquí y la otra de aquí.

1 comentario:

Casiopea dijo...

Sin etiqueta, con etiqueta.
La ceguera del conocimiento.